Eventos: ¿una moda pasajera o una tendencia que se impone día a día?
Todos los individuos, durante nuestra vida, participamos de eventos de diversa índole, por que nos permite relacionarnos y por que no, divertirnos. ¿Pero cuál es la motivación que nos lleva a reunirnos?
La experiencia nos ha demostrado que sentimos esa necesidad de juntarnos con el fin de celebrar un acontecimiento. Pero nos preguntamos ¿Qué nos impulsa a reunirnos? Son diversos los motivos, como perseguir fin de lucro, realizar una actividad benéfica, tener un objetivo político, deportivo o simplemente celebrativo.
Sin embargo, y teniendo presente la definición de eventos, la cual lo describe como “una reunión de personas que acuerdan encontrarse en una fecha y lugar determinado”, puedo aseverar que es el único espacio donde se logra una interacción cara a cara entre los concurrentes, siendo la forma de comunicarnos mas efectiva que existe.
Ello me permite pensar en que es el medio más eficaz para alcanzar los objetivos que nos proponemos desde el momento en que decidimos realizar un evento.
Por otra parte, debo decir que, gran parte de su auge se debe a que, los profesionales dedicados a este rubro, han entendido que, como en toda profesión, es necesario una formación, experiencia y actualización permanente. Es necesaria esta educación por que todo evento debe ser planificado, organizado y nada debe dejarse librado al azar.
Lo más buscado es la originalidad, dejar una huella en los asistentes, tocar sus emociones y que recuerden la situación vivida como única, que hablen de ella y también de quien la organizo.
Si conseguimos esto, manteniendo una buena planificación y adelantándonos a todo suceso que pudiera acontecer, lograremos que el evento sea exitoso, y sobre todo que nuestro cliente, en el caso de reuniones empresariales, alcance su fin, el cual es llegar a su público objetivo proyectando una imagen favorable.
Por todas estas razones, puedo decir que, el auge de los eventos no parece ser una moda pasajera, si no una tendencia que crece y se impone día a día.
Prof. Arisio Romina.
Todos los individuos, durante nuestra vida, participamos de eventos de diversa índole, por que nos permite relacionarnos y por que no, divertirnos. ¿Pero cuál es la motivación que nos lleva a reunirnos?
La experiencia nos ha demostrado que sentimos esa necesidad de juntarnos con el fin de celebrar un acontecimiento. Pero nos preguntamos ¿Qué nos impulsa a reunirnos? Son diversos los motivos, como perseguir fin de lucro, realizar una actividad benéfica, tener un objetivo político, deportivo o simplemente celebrativo.
Sin embargo, y teniendo presente la definición de eventos, la cual lo describe como “una reunión de personas que acuerdan encontrarse en una fecha y lugar determinado”, puedo aseverar que es el único espacio donde se logra una interacción cara a cara entre los concurrentes, siendo la forma de comunicarnos mas efectiva que existe.
Ello me permite pensar en que es el medio más eficaz para alcanzar los objetivos que nos proponemos desde el momento en que decidimos realizar un evento.
Por otra parte, debo decir que, gran parte de su auge se debe a que, los profesionales dedicados a este rubro, han entendido que, como en toda profesión, es necesario una formación, experiencia y actualización permanente. Es necesaria esta educación por que todo evento debe ser planificado, organizado y nada debe dejarse librado al azar.
Lo más buscado es la originalidad, dejar una huella en los asistentes, tocar sus emociones y que recuerden la situación vivida como única, que hablen de ella y también de quien la organizo.
Si conseguimos esto, manteniendo una buena planificación y adelantándonos a todo suceso que pudiera acontecer, lograremos que el evento sea exitoso, y sobre todo que nuestro cliente, en el caso de reuniones empresariales, alcance su fin, el cual es llegar a su público objetivo proyectando una imagen favorable.
Por todas estas razones, puedo decir que, el auge de los eventos no parece ser una moda pasajera, si no una tendencia que crece y se impone día a día.
Prof. Arisio Romina.
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